Snowboard en Suiza

Está lleno de pueblos y paisajes de montaña perfectos para disfrutar. Otros paisajes palidecen en comparación con lo que Suiza tiene para ofrecer. Además, la hospitalidad suiza es la mejor que puede ser. El terreno es de primera clase y la cocina de montaña es insuperable: su paladar se lo agradecerá.

Pero antes de partir hacia las montañas nevadas de Suiza, debes conocer todos los hechos. Para planificar tu viaje necesitas saber cómo llegar, dónde alojarte, qué estaciones de esquí visitar para tener la mejor experiencia y cuánto te costará todo el viaje. Si sabes todo esto de antemano, lo pasarás genial.

Desafortunadamente, hacer toda esta investigación por tu cuenta puede ser frenético y, a veces, incluso imposible. Por eso hemos elaborado una lista de 10 rutas para ayudarte a aprovechar todo al máximo y crear grandes recuerdos.

1. Verbier

Verbier es una estación mundialmente famosa que atrae a esquiadores de todo el mundo, al menos a todos los que pueden permitírselo. Verbier es sin duda la versión suiza de Chamonix, que atrae tanto a practicantes de snowboard como a esquiadores extremos, pero a diferencia de Chamonix, es una estación de esquí en toda regla con un enorme y moderno sistema de remontes interconectados y pistas perfectamente acondicionadas. En Suiza la gente se educa al máximo y se maneja de la manera más concienzuda y considerada, pero en Verbier les pones los esquís, les añades un poco de nieve polvo y a partir de ahí todo es cuesta abajo. Quizás no sea culpa de los suizos, pero si quieres pistas frescas, debes afilar los codos y no esperar a que otro huésped salve la pista, porque si dudas aunque sea un momento, un loco te saltará una piedra por encima de la cabeza. alto y te roba la línea. Los teleféricos de Verbier se encuentran entre los mejores de Europa. Tras un breve descenso desde uno de los numerosos remontes se abre un amplio y larguísimo campo de nieve polvo o una pendiente pronunciada. Una vez que hayas localizado las áreas cercanas, lo cual es rápido, puedes tomar un guía y explorar las vastas laderas de las montañas.

Verbier es una enorme zona que combina Nendaz, Veysonnaz, La Tzoumaz y Val de Bagnas en 4 valles con 94 remontes y más de 400 km de pistas, todas accesibles con un solo forfait. Realmente hay algo para todos, incluso los que no esquian, y para los practicantes de snowboard serios es imprescindible, pero nada es barato. Echa un vistazo al informe de Néndez para ver algunas de las rutas fuera de pista en 4 Valles.

Si buscas clases de freeride, te recomendamos Vivid Snowboarding, una escuela de snowboard especializada en Verbier que ofrece clases privadas para todos los niveles y gustos y también organiza campamentos exclusivos de backcountry y freestyle. Puedes encontrar la escuela en la oficina de la escuela de snowboard, que se encuentra en la tienda Surefoot junto a la estación principal de remontes Medran en Verbier. Vivid también organiza campamentos de snowboard que duran cinco días completos de entrenamiento. Se podrán realizar con un máximo de 6 personas por grupo y un mínimo de 4 personas por grupo.

2. Davos

Davos no es sólo un importante destino para practicar snowboard, sino también una ciudad enorme que ofrece todo lo que necesitas para divertirte. Este vibrante destino lo tiene todo: toneladas de nieve profunda, muchos árboles, grandes hits naturales, halfpipe, parques de diversión, boardercross y paseos nocturnos. Y todo esto en 320 kilómetros (200 millas) de fantástico terreno para practicar snowboard en pistas seguras para la nieve.

El área consta de 5 montañas diferentes y tendrás que usar autobús o tren para desplazarte, pero cada área tiene suficiente que hacer para mantener tu atención durante al menos un día entero. Jakobshorn y Parsenn son las zonas más grandes y populares con ascensores conectados a ambos lados de Davos. El Jakobshorn tiene dos halfpipes y un gran parque de terreno, que se mantienen en excelentes condiciones; El halfpipe base se utiliza al final de cada año para la competición O'Neil Evolution 6*TTR. Parsenn es la columna vertebral de Davos, conecta Davos Dorf con Klosters y ofrece muchas buenas carreras largas y oportunidades de freeride. Desde Klosters se puede llegar a Madrisa, que es un poco más tranquila, y a Pischa, que ofrece buenas posibilidades para el freeride. El Rinerhorn es la última zona y está escondido al final del valle. Afortunadamente, su ubicación y los numerosos remontes mantienen alejada a la mayoría de las personas y le brindan la oportunidad de atravesar las líneas del frente en áreas abiertas y boscosas.

A finales de enero tendrá lugar aquí el Foro Económico Mundial, que acogerá al Sr.-Líderes mundiales tipo Smith de Matrix. Es casi imposible encontrar alojamiento, pero es el momento perfecto para ir a las pistas, y todos en la ciudad intentan fingir ante los medios que les importa.

La zona de esquí es una de las primeras en Graubünden que abre a finales de noviembre y las condiciones de nieve suelen ser muy buenas hasta que cierra a mediados de abril.

El lugar tiene 10.000 habitantes y ofrece todos los servicios que necesitas. Davos no es un centro de fiestas (pocos lugares en Suiza lo son), pero hay muchos buenos bares y los fines de semana la ciudad se llena de zuricheros que buscan divertirse. Llegar a Davos y sus alrededores no podría ser más sencillo. Hay conexiones directas en tren con Davos Dorf, Platz y Klosters, y el viaje en tren desde el aeropuerto de Zúrich dura aproximadamente 2 horas y media. Los autobuses conectan la ciudad de Chur, en el centro de los Grisones, a través de la excelente estación de tren de Lenzerheide en 90 minutos, y hay un buen autobús de esquí gratuito que conecta todas las zonas de montaña.

3. Calle Moritz

St. Moritz (1800 m) tiene dos particularidades clásicas: por un lado, es uno de los lugares naturales de freeride más bellos de Suiza.Por otra parte, St. Moritz atrae, sobre todo a principios de invierno, a una clientela muy exclusiva, entre la que se encuentran estrellas de cine y aristócratas, lo que también se refleja en los precios.Los precios reflejan esto. Vienen a disfrutar de los hermosos picos y pueblos, a visitar las elegantes tiendas de diseñadores y, en general, a destacar.De hecho, ¡muchos miembros de la brigada peluda ni siquiera van a las montañas!

St. Moritz se encuentra en Engadina, cerca de la frontera con Italia, y junto con las zonas de Pontresina y Diavolezza forman la región de la Alta Engadina. La Diavolezza es una montaña glaciar abierta de noviembre a mayo y es tan remota que sólo los esquiadores más experimentados pueden utilizarla. Calle Moritz, que ofrece acceso a las pistas de Corviglia y Marguns, es una zona formada en gran parte por pistas intermedias que están abarrotadas la mayoría de los días y lamentablemente no hay muchas pistas para que los expertos escapen de las hordas de esquiadores en formación. Sin embargo, hay muchas pistas fuera de pista que sólo se pueden explorar con la ayuda de un guía local. Corvatsch es la última zona a un corto trayecto en autobús desde St. Moritz está lejos, pero puedes hacer snowboard en la ciudad. Esta zona es la mejor de todas y ofrece paisajes increíbles a los freeriders y freestylers que buscan el éxito natural.

4. Laax

Laax y su hermano pequeño Flims son un santuario nacional suizo y un verdadero paraíso para los practicantes de snowboard. Popular entre los practicantes de snowboard, el complejo es un centro de snowboard de pleno derecho que conecta con la tranquila Flims. Juntos forman una zona considerada uno de los lugares más amigables con el snowboard en Suiza. Desde hace 4 años se celebra aquí el Burton European Open y a mediados de marzo también se celebra aquí la final de la serie BRITS. Aquí no solo vienen de fiesta los mejores ciclistas, sino también grandes estrellas del pop y DJ.

El glaciar Vorab abre en octubre con un parque de terreno fácil, pero el acceso desde la base puede tardar hasta una hora. Cuando la temporada se abra por completo en diciembre, el parque se trasladará a su ubicación principal debajo de Crap Sogn Gion y el área de Vorab se convertirá en la puerta de entrada a algunas de las mejores pistas de freeride que la zona de esquí tiene para ofrecer.

Pocos practicantes de esquí de travesía pueblan estas pistas y si alguna vez hubo una montaña diseñada para practicantes de snowboard sin dos tablas, es ésta. Laax también tiene algunos de los mejores remontes de Europa, con muchas góndolas de alta velocidad que te llevan a los picos y, a pesar de su popularidad, rara vez te encontrarás en una larga cola. Los principiantes también apreciarán que solo hay unos pocos remontes y que puedes sortearlos fácilmente sin estar restringido de ninguna manera.

La desventaja es que la administración de la zona de esquí tarda en abrir algunas zonas después de un nuevo drenaje y aprovecha cada oportunidad para cerrar los remontes, especialmente en la zona de Cassons. Laax no es una zona de esquí desconocida y para los freeriders que quieran probar sus primeras pistas es importante tomar el primer remonte, ya que todo va increíblemente rápido.

El alojamiento y las instalaciones están repartidos entre Laax y Flims, pero todos están conectados mediante un servicio de autobús gratuito. La base de Laax ha mejorado significativamente desde la construcción del nuevo Rocks Resort; Ahora hay algunos bares, restaurantes y tiendas más, pero el ambiente es un poco artificial.

5. Zermatt

Cuando piensas en Zermatt, probablemente piensas en dinero, y así es. Sin embargo, aquí hay algunas montañas importantes que pueden mantener ocupado a un freerider durante algunas semanas.

El pueblo se encuentra a la sombra del imponente Matterhorn, y todos los chalets se arrodillan para admirar la vista. Es un lugar compacto y atractivo donde no hay coches sino carritos eléctricos que se desplazan.

Zermatt, junto con Cervinia, forma el Matterhorn Ski Paradise y tiene 313 km de pistas. Los precios de los forfaits son elevados, pero si no vas a Cervinia, no necesitas pagar extra por un pase y podrás disfrutar de los 183 km de pistas de Zermatt.

Zermatt es uno de los pocos lugares del mundo donde se puede practicar snowboard los 365 días del año. En verano, el glaciar Matterhorn ofrece 22 kilómetros de pistas y un buen parque y tubing. En invierno es el punto de partida de un enorme descenso de 2263 m hasta el pueblo.

La zona está conectada por muchas pistas estrechas y las pistas hacia el pueblo son particularmente desafiantes. Pero lo que atrae a los practicantes de snowboard no son las pistas, sino las numerosas rutas fuera de pista y freeride de gran calidad.

La vida nocturna es muy animada para los estándares suizos, con algunos bares y clubes de montaña abiertos hasta las 3 a.m.

6. Películas

Flims a menudo se ve eclipsado por su hermano mayor Laax. Sin embargo, esta joya merece su propia plataforma, y ​​aunque Laax es mucho más grande y ofrece un terreno más transitable, Flims puede valerse por sí solo. Como socio más pequeño, Flims también suele estar un poco menos concurrido, aunque las dos zonas de esquí están conectadas en las pistas mediante remontes y tienen un forfait común. Flims es un poco más alta que Laax, pero en general las pendientes son las mismas en ambas regiones. Arriba, en las montañas, podrías pensar que son dos estaciones de esquí, pero en muchos sentidos no lo son. Ambas zonas de esquí tienen un forfait común y las pistas están bien comunicadas. Las pistas de Flims están bien acondicionadas y ofrecen una mezcla de suaves pistas azules y rápidas pistas negras en las empinadas laderas de Cassons.

7. Crans Montana

Si su idea de pasar un buen rato equivale a pistas bañadas por el sol y compras de alto nivel, entonces Crans Montana es el lugar para usted y, aunque tiene fama de ser un lugar al que van los ricos y famosos, Para hacer precisamente eso, si está dispuesto a hurgar un poco más en sus bolsillos, aquí encontrará grandes ofertas para todos.

A los practicantes de snowboard les encantará el moderno sistema de remontes, las variadas pistas, el parque de nieve de clase mundial y el terreno fuera de pista de fácil acceso. Lejos de las pistas, Crans Montana ofrece una amplia gama de actividades, gastronomía local, restaurantes, casinos y numerosos bares, lo que convierte a Crans Montana en el destino perfecto para una semana de diversión en la nieve.

A pesar del nombre combinado, la zona de esquí combina las dos localidades de Crans y Montana, que se han unido para formar una zona de esquí de más de 140 km de longitud. Se ofrecen buenos cursos y hay un buen sistema de ascensores. También hay muchos cafés de montaña, que sorprendentemente no son tan caros como podría pensar. Aunque el punto más alto de la zona de esquí se encuentra en el glaciar Plaine Morte a 3.000 m de altitud, la mayoría de las pistas están muy por debajo de esta altitud, y las pistas más bajas ofrecen la oportunidad de jugar entre los árboles. Las laderas del sur permiten esquiar bien bajo el sol, pero pueden dar lugar a zonas de barro al final de la temporada.

La vista desde la cima del glaciar Plaine Morte no es menos impresionante si vienes por las vistas. Desde una altura de 3.000 metros ofrece un increíble panorama de 180° de 19 cuatromiles, incluidos el Matterhorn y el Mont Blanc.

Existen varias escuelas para aprender freestyle, incluida la Escuela de Esquí ESS, que ayuda a quienes quieren saber esquiar correctamente en un pipe o hacer grandes aires, todos ellos uno de los niveles más altos de clases de snowboard en Europa ofrece.

8. Quejándose

Busca siempre lugares más tranquilos, y en la familia Jungfrau está Mürren, que esconde la vida nocturna de un pueblo fantasma y tiene algunos de los terrenos más extremos no sólo de la región sino de la propia Suiza.

Murren se encuentra en un entorno espectacular, sobre un acantilado de 700 m de altura sobre el pueblo de Lauterbrunnen. Para cualquier saltador base que se precie, este lugar está en lo más alto de la lista, y hasta el momento más de 30 personas han perdido la vida intentando circunnavegarlo.

No hay coches en el pueblo, por lo que hay que utilizar uno de los dos teleféricos que suben a cada extremo. Al final del día, cuando la multitud se va, el pueblo bosteza y rápidamente se calma. Si planeas pasar la noche bebiendo alcohol, debes evitar este lugar. En su lugar, acuéstate temprano e intenta completar las primeras subidas para aprovechar al máximo el tiempo que tienes para explorar esta increíble zona.

A todos los fans de James Bond les encantará el escondite de Blofeld de la película "Al servicio de Su Majestad" en la cima del Schilthorn (2.970 m), el punto más alto de la ciudad, se reconoce inmediatamente. Tómate una foto con George Lazenby y luego sigue los pasos de Bond esquiando fuera de pista.

Aunque las áreas de esquí no son suficientes para una semana, cuando se combinan con las otras áreas de Jungfrau hay suficiente para mantenerte ocupado durante toda una temporada, y mucho menos una semana. Llegar a Wengen es un poco tedioso, por no hablar de llegar a Grindelwald. Aunque todo está conectado mediante teleféricos, pasarás una buena hora entre los pueblos, pero seguro que no te importará mirar por la ventana el fantástico terreno.

9. Leysin

Leysin se encuentra en la parte francófona de Suiza y se ha convertido en uno de los mejores y más populares centros de snowboard del país. A diferencia de muchas otras estaciones de esquí populares, Leysin no es conocida por el esquí, lo que la ha llevado a ser muy apreciada por los practicantes de snowboard. Esto ha contribuido al encanto económico y amigable de la estación de esquí, que carece de ajetreo y bullicio. Leysin conecta los dos pueblos de montaña de Villars y Les Diablerets formando una red de pistas muy aceptable de 60 km de longitud.

El complejo ha atendido a los practicantes de snowboard durante años, fue sede de la competencia ISF en 1992 y hoy es sede del TTR Nescafe Camps Open (www.nescafechamps.ch), donde los mejores ciclistas del mundo compiten en pipe y park.

Leysin es en realidad una antigua ciudad de montaña en expansión y no un complejo moderno construido expresamente como otros cercanos. Lo que se obtiene aquí es una montaña alta que, en un buen día de invierno, lo tiene todo para hacer felices a los esquiadores avanzados y aventureros, pero también atrae a los principiantes que no quieren utilizar el remonte de inmediato. Un aspecto notable de Leysin es que no es una estación de esquí popular para los esquiadores de travesía, lo cual es bueno porque las pistas no están abarrotadas, aunque pueden estar un poco abarrotadas los fines de semana con lugareños y ginebrinos. Pero una vez que estás en las pistas, puedes caminar durante horas por un terreno fantástico sin ver a nadie más.

10. Nendaz

Nendaz nunca se menciona cuando se habla de las mejores estaciones de esquí del mundo, pero si echas un vistazo al mapa de pistas de Verbier verás el pequeño pueblo a la izquierda. Nendaz está en 1.Tiene 400 m de altura y es el corazón del dominio esquiable de los 4 Vallées, que incluye 96 remontes y más de 250 kilómetros de pistas. Un corto trayecto en coche o unos cuantos remontes le llevarán al punto más alto de la zona, Mont Fort a 3300 m, donde podrá salir de pista.

Nendaz no es barato, pero ahorrarás mucho dinero si te quedas aquí en lugar de Verbier y tienes acceso a la misma cadena montañosa y a increíbles zonas fuera de pista. Los freeriders quedarán gratamente sorprendidos al llegar con lo que esta zona tiene para ofrecer tanto dentro como fuera de las pistas. Para los esquiadores intermedios y experimentados, una estancia de una semana es un placer absoluto, mientras que los amantes de las emociones fuertes pueden esforzarse hasta el límite. En el caso de que no haya nieve, se han instalado sistemas de fabricación de nieve desde la cima hasta la estación del valle. Por lo demás, Nendaz también ofrece heliboard con recogida de pasajeros y guía de montaña.

Se puede volar hasta el corazón del glaciar Rosablanche y esquiar en nieve profunda, pero cuando hace buen tiempo esto no es necesario ya que hay numerosas pistas alejadas de los modernos remontes. Si quieres explorar las pistas de Verbiers pero no quieres gastar mucho dinero, Nendaz es para ti.